Cualesquiera sean los que vengan a
Mí, Yo cuidaré de ellos hasta su
último aliento. Yo soy el Camino, la
Verdad y la Vida. Nadie que me ame
tiene nada que temer, porque Yo lo
guiaré y lo protegeré como las
pestañas protegen a los ojos. Pedid
por los desvalidos y los desposeídos
y Yo pediré por vosotros. Dad y se
os dará. Que la bendición de Mi
Padre os acompañe en todo
momento. Caminad siempre con
cautela y ayudando a los demás
en lo que buenamente podáis.
Os bendigo en el Nombre de Mi
Padre, que es uno conmigo
y con vosotros. Soy vuestro
y vosotros sois Míos.
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